Los Kurbun (demonios) carecen de cualquier rasgo
que los equipare a cualquiera de las razas de Daegon, ya sea mental, física
o moralmente. Sus habilidades, y resistencia no tienen parangón
con ninguna otra raza conocida, y el apelativo de seres vivos es algo artificioso
ya que como acabo de decir no hay ninguna manera de encontrar lazos comunes
con cualquier otro ser conocido.
La creencia común es la de que los Kurbun existen con un único fin, la destrucción (se ha dicho en mas de una ocasión que solo hay dos tipos de Kurbun. Los que buscan la destrucción, y los que buscan el poder. Pero esta afirmación a parte de ser extremadamente superficial demuestra una falta total de conocimiento sobre el tema). Pese a lo que pueda parecer la sociedad Kurbun podría decirse que es la mas civilizada de las existentes (eso si, teniendo en cuenta las obvias diferencias culturales). Las nueve castas son algo mas que una mera clasificación de orden social pues, aparte de cumplir una función meramente distintiva, también forman parte de la forma de ser de los componentes de cada uno de las susodichas castas. Los componentes de cada una de las castas han sido creados para una función en particular que es objetivo de su existencia, su libertad de acción fuera de esa misión es muy limitada, lo cual ha llevado a muchos estudiosos a la errónea conclusión de que esta falta de libertad es producida por una inteligencia menor. Nada mas alejado de la realidad, los Kurbun (salvo los Rieg, aunque entre algunos de estos ha llegado a aparecer algún espécimen inteligente) tienen una inteligencia con mucho superior a la de cualquiera de las demás razas llamadas inteligentes. Se ha dicho también en mas de una ocasión que la carencia de un mundo en el que asentarse o, la inexistencia de un sol y luna que les indique el paso del tiempo son los causantes de su conducta, en un vano intento de compararlos y tratar de comprender sus reacciones con respecto a las de otros seres conocidos. Un nuevo error, los Kurbun nada tienen que ver con los humanos, Krieg, Ilawar o Elaen, así como todas estas razas partieron de una base genética común (los humanos), y comparten unas creencias mas o menos comunes (en cierto modo obligadas por las leyes dictadas por unos seres supuestamente omnipotentes, y que amenazan con castigos a aquellos que las incumplen) los Kurbun parten de la esencia del mismo mal, el cadáver de Namak, y no se cuestionan ni por un solo momento la “moralidad” de sus actos. Por lo tanto es totalmente imposible (e injusto) juzgar sus actos con los mismos baremos, y leyes que al resto de seres. Carecen del manido concepto de “bien y mal”, ellos son lo que hacen, y no buscan justificación alguna para sus actos ni sienten ningún tipo de remordimiento por ellos. Carecen también de cualquier tipo de vinculo emocional o afectivo entre ellos. Cada una de las castas puede ser considerada como una raza independiente, y así se organizan . Es muy raro ver juntos a dos Kurbun de distinta casta (salvo en las zonas “humanizadas”). Los Kurbun de castas inferiores siempre seguirán las ordenes de los de casta superior e, intentaran cumplirla cueste lo que cueste. Con esto no quiero decir que tomen acciones suicidas en el intento de sus misiones, los Kurbun son seres muy pacientes (la inmortalidad es una gran ayuda para ello), y tomaran el tiempo que consideren necesario para llevar a cabo sus misiones, ya sean días, años, siglos o, milenios, el concepto mismo del tiempo carece de sentido para ellos. Sus formas no vienen dadas por su creador (no hace falta una forma definida para sembrar el terror y la destrucción) sino por las sensaciones que causan a aquellos seres que sienten su legado. Así que su aspecto varia según quien les observa, cada ser los ve como la máxima expresión del horror. Basándose en esta característica se les ha llegado a suponer un parentesco con los Jonudi, pero los Jonudi como raza inferior ve su forma condicionada por el ambiente en el que se han asentado, y este aspecto que toman es voluntario e irreversible, mientras que la apariencia tomada por los Kurbun no solo no es voluntaria (ni consciente) sino que como ya he dicho varia con cada observador. Pero lejos de parecer grotescos a los Kurbun se les suele observar con una mezcla de terror y fascinación sus formas son simplemente perfectas para la labor que realizan careciendo de adiciones artificiosas, ellos son en si mismos una contradicción. De todas formas las descripciones físicas que daré a continuación hacen referencia únicamente a los que habitan en las zonas humanizadas Extraído de: Kurbun “La Dominación”
Kurbun, Los Asesinos de Dioses Y Baal llegó junto a sus seguidores a Namak,
la tumba de su padre, e introduciendo su mano en la herida fatal de Namak
causada por Avjaal, extrajo su corazón, y por primera y ultima vez,
dio vida creando a los primeros nacidos, los Kurbun, y al primero de ellos
lo llamo Shaedon. Tras hacer esto los celos invadieron a Baal que prohibió
a sus siervos la creación de vida.
Darek, Los que Reinan Los Darek (Padres) son la segunda casta mas poderosa
de Namak. Junto con los Kurbun, y las Karesh son los únicos capaces
de crear. Crean vida a partir del cadáver de Namak. A pesar de carecer
de las cualidades físicas de los Malesk poseen un vinculo especial
con el plano en si, lo que les otorga grandes ventajas con respecto a las
otras castas. Así como los Heid están limitados en sus capacidades
de transmutación a la materia muerta, los Darek tienen poder sobre
todos los espectros de la existencia. Solo los primeros nacidos de entre
todas las castas son capaces de resistirse a estas manipulaciones.
Karesh, Las que Dominan Las Karesh (Concubinas) son la única casta
híbrida aceptada por los Darek, y por lo tanto también aceptada
por la sociedad Kurbun (la otra son los Jo´Na´Ryum, pero son
considerados una aberración tanto por los Ailanu, como por los Kurbun
a pesar de tener en mismo origen que las Karesh). Son una mutación
de las hembras Ailanu que llegaron a este plano que fueron tratadas por
Sethrem Jonar. Se dice que la mezcla de genes Kurbun y de hembra Ailanu
son los causantes de tan extraña especie. Las explicaciones se buscan
en la carencia de sexo de los Kurbun (incapaces por ello de reproducirse
de la manera que conocemos los demás seres), al mezclarse estos
genes con los de un ser capaz de “crear vida” como lo son los de una hembra.
Malesk, Los que Destruyen Los Malesk (Destructores)
Heid, Los que Transforman Los Heid (Magos) Thaigen, Los que Luchan Los Thaigen (Guerreros) Yalesh, Los que Cambian Los Yalesh (Multiformes) Shaik, Los que Acechan Los Shaik (Espías) Rieg, Los Malditos El tiempo pasaba y Rotark, hijo de Tayshar, se
sentía vacío. Había seguido a Baal tras la guerra
del principio de los tiempos, pues su padre, Tayshar, al ver que estaba
manchado por la esencia de Namak, lo había repudiado. Pero a pesar
de ello él no sentía rencor contra su padre, y busco un modo
de redimirse ante el. Así que Rotark fue a escondidos hasta el cadáver
de Namak e introduciendo su mano en el cadáver, extrajo su cerebro.
Tras hacer esto, exprimió en sus manos, creando con ello a los Rieg.,
Y así Rotark junto con los Rieg, ataco a Baal. La lucha se extendió
durante momentos eternos, pero como tenia que ser Rotark cayo derrotado,
y fue exiliado a los dominios de Yrkay, y condenado a las torturas eternas
del señor del dolor.
Los Rieg (escoria) son una de las castas mas poderosas
físicamente hablando (solo son superados en este aspecto por los
Malesk) su único problema es su limitada inteligencia, gracias a
la cual suelen ser fácilmente convencidos por otras castas mayores
para actuar como guardaespaldas.
Jo´Na´Ryum, Los Descastados Fracaso, esa palabra hasta ese momento desconocida
para ellos comenzaba a cobrar sentido. Ellos, los dominadores de galaxias,
ellos, los seres superiores, ellos, LOS AILANU, finalmente conocían
la derrota. Habían desafiado a sus creadores, y lo habían
pagado. Exiliados a un mundo sin luz, un mundo de amenazas constantes.
Pero ello no hizo sino excitarlos. Un nuevo reto se decían, por
fin un nuevo reto.
Extraído del Diario de Prushq Akhar
Los Ailanu fueron exiliados a Namak tras desafiar
a los Tayshari. Allí desde su llegada fueron atacados por hordas
de Kurbun, y por una extraña enfermedad que afectaba a toda su población.
A pesar de su obvia inferioridad física, no estaban ni mucho menos
indefensos. Los Tayshari les habían exiliado pero les habían
concedido el privilegio de conservar gran parte de su tecnología,
y con esta repelieron estos ataques con relativa facilidad, gracias también
a la ayuda de los Primeros Nacidos, que misteriosamente actuaron en su
favor.
La Sociedad Jo´Na´Ryum:
Las Castas Jo´Na´Ryum |